La obra se ejecuta en el predio de la Bodega Encantada y se integrará al proyecto de la Ruta del Vino de Salta. Otorgará a los Valles Calchaquíes un atractivo turístico de primer nivel que enriquecerá y fortalecerá a la región, se trata de un proyecto que a través de recursos estéticos y narrativos busca envolver emocionalmente al público.
Frente del Museo de la Vid y el Vino
Los trabajos incluyeron además la restauración del edificio donde actualmente funciona el Museo y la construcción de dos edificios nuevos para dotarlo de otros espacios de exposición. Arquitectónicamente fue desarrollado en dos volúmenes que establecen un expresivo contrapunto entre la imagen tradicional del antiguo local y la modernidad del nuevo edificio.
En el edificio nuevo se encuentra la sección denominada Memoria de la Vid, donde a través de innovadoras técnicas de exhibición, con efectos escénicos, lumínicos, programas multimedia y presentaciones audiovisuales el visitante tomará contacto con diferentes escenas relacionadas al suelo cafayateño: el sol, el agua, el trabajo del hombre y los viñedos más altos del mundo.
La infraestructura que ocupa hoy el Museo del Vino fue remodelada y reparada, al igual que las piezas que se exhiben, que serán puestas en valor. En este espacio se desarrollará la sección donde el vino de Cafayate contará su historia, que constituye la Memoria del Vino.
El proyecto integró además una serie de patios interiores que homenajearán al sol, al agua y a la tierra y donde se prevé una pérgola. Este patio tendrá acceso desde la calle. Se integrará la tradición con la modernidad y la tecnología, la literatura con el trabajo y la naturaleza con el hombre, por lo que será uno de los museos temáticos más importantes de Latinoamérica y el único Museo del Vino en Argentina con esas características y tecnología.
La obra incluyó también mejoras en el predio donde se realiza la tradicional Serenata a Cafayate. En este caso se dotó al predio del equipamiento e infraestructura de apoyatura necesaria para el desarrollo de espectáculos públicos al aire libre y, por otro lado, otorgar las condiciones necesarias de habitabilidad y seguridad al predio, reforzando y multiplicando los servicios a ofrecer.
La obra está a cargo de la empresa J. R. Martínez S.A. y la inversión total es de $4.206.106,16.
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No se les cae una idea a algunos.Museo nuevo con forma de escuela…
Ya es suficiente con ver ese Banco en la esquina de la plaza y el edificio del turco….
ahora esto….encima el museo del vino de Cafayate!!!!!!!
No se puede creer…
Lo unico que falta es que digan que no hay plata….
Habiendo fabricas de ladrillos cerca.,..piedra por todos lados….arena….
Es mucho por hoy…..
Es que esta pensado ,mas que nada, para el turista..
tengamo en cuenta que cafayate es una ciudad turistica,ya tienen otras cosas que respetan su cultura.
vi el museo del vino y me parece estèticamente innovador ya que se encuentra inserto en un lugar muy tradicional,lo que me resultò interesante es la combinacion de la tegnología y lo tradicional el museo habla por sì mismo ,no podemos dejar de lado la tecnologìa, los diseñops modernos y sobre todo nuestra identidad y hacia dònde vamos como ciudadanos.
asì como se construyo este novedoso museo del vino ,podrian construir un museo de artes plàsticas, ya que cafayate no tiene ninguno y es una pena siendo una ciudad.
un museo con teatro serìa una buena combinaciòn para el arte en general en el pueblo cafayateño, tambièn seria de articulaciòn para distintas instituciones,familia,escuela,doctrinas,etc.
y un medio democràtico para la libre expresiòn y alfabetizacion en la dimensiòn del arte.
Ayer ví la construcción del museo de la vid y el vino y me parecio una infraestructura que no tiene nada que ver con las construcciones de nuestro valle. parece una caja, si forma, sin estilo. hubieran respetado el diseño colonial.
parece una caja de vino animana gigante. una construcción que no respeta nuestra cultura.
Cuando dicen que el edificio no respeta nuestra cultura, les pregunto: qué es cultura sino algo dinámico, qué tendría que ver el estilo italianizante de la bodega Encantada que forma parte del Museo con la tradición del valle si esto no incluyera la posibilidad de mutar, de renovar, de emular y por qué no de copiar. Ocurre que a comienzos del siglo XX cuando el espíritu progresista de esa gente miraba a europa y modificaba las fachadas de Cafayate en «pos de progreso», cambiaba también elementos «originales» del valle, pero generaron lo que ahora Ustedes creen eterno e intocable. La producción cultural en general y el entorno construído en especial, es la expresión misma del quehacer humano del hoy y del aquí, y no podemos, porque es un absurdo, repetir formalismos del pasado. La solución que se buscó en el edificio del Museo, mejor o peor, fue la de así como el pabellón 2 de la vieja bodega encantada representaba a la arquitectura industrial de la época cuando fue construida, el pabellón 1, se construyó en un estilo de arquitectura industrial contemporánea, propia de nuestra época, con las resoluciones estéticas y técnicas predominantes de hoy. Para alegría de los lectores, hay algo muy fuerte de la cultura calchaquí, no en el formalismo sino en el uso, y es la concepción de patio, que es el verdadero corazón del conjunto, y a mi juicio también lo es de la arquitectura de los valles. Perdón por la lata.