El Intendente de Cafayate adeuda al gremio ATE las retenciones de cuota sindical de los cuatro años de su gestión. El monto podría sobrepasar  los dos millones de pesos.

Fernando Almeda

El tema se encuentra muy cerca de la judicialización tras infinitos reclamos del gremio que no son atendidos por el intendente de Cafayate, quién se niega sistemáticamente a recibir a los delgados para iniciar negociaciones por la deuda millonaria.

La retención de la cuota sindical durante los cuatro años de gestión del actual intendente y la falta de depósito en las cuentas del gremio, sumado a la intransigencia de Almeda, deja a este muy cerca del inicio de la judicialización por parte de ATE para cobrar la deuda a través de la ejecución fiscal, lo que podría iniciarse con el envío de una Carta Documento en los próximos días.

Almeda ya tiene experiencia en el tema, y la actitud soberbia de no querer atender ni negociar frente los reclamos de estas características, derivó en una resolución judicial de ejecución fiscal por los aportes sindicales de UPCN y SOEM, llegándose a embargar las boleterías de la Serenata a Cafayate causando un escándalo en medio del festival. Esto también significó un enorme perjuicio a las arcas municipales porque la deuda original creció exponencialmente por los intereses aplicados a la deuda y las costas judiciales, que se podrían haber evitado en negociaciones no judicializadas.

En el caso de ATE el monto mensual que Almeda retiene de cuota sindical en cada pago de sueldo ronda los $35 mil pesos lo que multiplicado por los cuatro años de su gestión llevaría la deuda a cerca de $1.700.000, esto sin contar los intereses generados por la demora. Si el caso se judicializa y todo termina en una ejecución fiscal la deuda puede terminar por duplicarse en el mejor de los casos.

Pero también de persistir Almeda en su actitud intransigente y soberbia, la demanda podría extenderse al fuero penal con una demanda por retención indebida, lo que no fue descartado por fuentes gremiales consultadas por radiocafayate.com quienes sostuvieron que “con el Intendente de Cafayate pasa siempre lo mismo. No hay posibilidades de dialogo ni de arribar a soluciones de común acuerdo. Lo lamentable es que termina llevando las cosas hasta el extremo que termina por perjudicar a la Municipalidad de Cafayate y a todo el pueblo porque después tiene que terminar pagando intereses y honorarios regulados por la justicia. Llevamos cuatro años de reclamos prudentes justamente pensando en no afectar las finanzas del municipio pero la actitud cerrada de Almeda no deja otro camino que la judicialización.

Recientemente Cafayate se vio perjudicado por este tipo de accionar y proceder del Intendente de Cafayate en el caso del Balneario negándose a reconocer y asumir una deuda de varios años con el consorcio que provee el agua para el llenado de la pileta. La falta de dialogo y la soberbia de Almeda llevaron a la judicialización de esa deuda y al crecimiento de la misma derivando en el hecho inédito, desde la inauguración del balneario, de que todo el mes de enero, pico de la temporada, no estuviera habilitado el principal natatorio público de nuestra ciudad.

A esto debe sumarse el grueso error que significó la decisión de vaciar la pileta durante el año 2015 generándole daños gravísimos con grietas en las paredes y al piso, problema evaluado por especialistas como de difícil solución. Esto último provocó que, una vez solucionado judicialmente el conflicto con el Consorcio de Riego, la pileta demorara en llenarse por las enormes pérdidas que tiene de manera permanente y se vea enormemente perjudicado Cafayate al no contar durante el mes de mayor afluencia turística con el balneario.